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Al subirte al escenario aprendes desde el principio

noviembre 14, 2019
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Le estoy sacando mucho jugo al libro de Stanislavski “El trabajo del actor sobre sí mismo en el proceso creador de la encarnación” y es que mientras lo voy leyendo se me van ocurriendo ideas sobre las que hablar precisamente aquí en mi web y es que es un libro esencial si eres actriz o actor de teatro.   

En la creación de un personaje debes aprenderlo todo de nuevo, el personaje no se va a relacionar como tú y si así lo hace será por casualidad, el resto de características debe haber mucha casualidad para que acaben siendo las tuyas.  

El personaje recién nacido para el actor.  

Por mucho que tu hayas aprendido a hablar, escribir, sentarte, relacionarte, cabrearte, etc. Tienes que aprenderlo de nuevo para incorporárselo a un personaje quien será a quien des vida, esta investigación y trabajo lleva su tiempo y sus conflictos, de hecho las primeras maneras de hacer las cosas que aprendes por lo general no son las que suelen funcionar en el personaje y es que cuando estás en la creación del personaje uno como actor debe romperse en muchas decisiones y debe tener muchos conflictos, por eso soy tan pesado en que hay que entrenar todos los días ya que mientras antes tengas esos conflictos antes sabrás desenvolverte en ellos.   

“Hay que aprender de nuevo a mirar, caminar, accionar, relacionarse y por supuesto hablar” tal y como está escrito en el libro, es que en la vida cotidiana la forma de hablar es distinta que, en el escenario, la diferencia está en como se dice. En la vida cotidiana hablamos a veces para distraernos o porque queremos comunicar algo que sentimos o imaginamos, pero en el escenario es distinto, tenemos que aprender a comunicar un texto que nos ha dejado el autor y que de primeras no tenemos ningún apego con él.   

En la escucha ocurre lo mismo, en la vida cotidiana escuchamos porque nos interesa o por necesidad, pero en la escena debemos analizar y saber qué es lo que quieren decir los personajes en ese momento para así poder interpretarlo como tal.   

Otro fallo que podemos encontrar en la comunicación de los personajes en escena es cuando después de tantos ensayos el texto se ha mecanizado, un problema porque no brota de intención interior de los personajes. En cambio en la vida real ocurre algo parecido con ciertas mecanizaciones del lenguaje como: ¿Cómo estás? ; Gracias; Adiós. Al decir estás palabras automatizadas las decimos sin decir nada de nuestra esencia simplemente las decimos en el momento que es oportuno, pero sin comunicar.   

Esta automatización del lenguaje lo podemos ver cuando los curas están dando las misas quienes están diciendo lo aprendido sin pararse realmente en lo que dicen, mientras piensan que van a hacer por la tarde, lo mismo ocurre en la enseñanza donde los alumnos memorizan la materia y la vomitan en los exámenes sin aprender intrínsecamente.   

El actor debe sacar ese texto y llenar “el vacío” que dejan unas palabras dichas automáticamente. Ese es el trabajo de interpretar un texto ya sea en cine, series o teatro. El trabajo del actor es comunicar un texto lleno de palabras y transmitirlo en emociones.  

  

Dedícale tiempo a entender el texto como si estuviera escrito en otro idioma.   

 

 

 

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